El Dr.Berché Cruz nos dice que los agentes implicados en la identificación o diagnosis de los alumnos con altas capacidades son de dos tipos, ya que se acostumbra a desarrollar en dos fases, la primera es la fase de nominación o detección y la segunda de identificación o diagnosis:
1ª. Fase de nominación o detección. Los padres y/o educadores de cualquier etapa educativa son los que participan en dicha fase. Muchos padres no pueden realizar la detección por falta de capacitación, pero dan la voz de alerta porque notan que su hijo/a es diferente. Entonces, acuden a la escuela para comunicar sus sospechas o preocupaciones al maestro/a o tutor, o a un profesional o centro especializado que se encargan de realizar los protocolos de detección. Otras veces es el/la maestro/a o profesor/a quién sospecha y propone a los padres realizarlos. En algunos casos, también pueden proponerlo el/la pediatra o algún otro profesional que se relacione estrechamente con el niño/a.
En esta fase, se utilizan cuestionarios específicos elaborados por expertos en alumnos/as de altas capacidades que facilitan al maestro/a o al especialista poder realizar la detección y que constituyen una base sólida para orientar la siguiente fase.
2ª. Fase de identificación. La realiza un equipo psicopedagógico con experiencia en el estudio de los/as niños/as con altas capacidades que dispone de instrumentos eficaces para medir el potencial intelectual (cociente de Inteligencia), las habilidades (talentos) académicas y no académicas, la creatividad (espacial, simbólica y semántica) y el desarrollo emocional del niño o de la niña.
Considera que los tests de CI son adecuados para medir la capacidad intelectual de un individuo siempre que estén debidamente actualizados (en el mercado aún hay muchos que no lo están). Pero se ha de tener en cuenta que la mayoría no miden los techos intelectuales y, lo que es más importante, no son buenos medidores de las diferentes áreas de talento.
Hay que tener muy presente que el número del cociente de inteligencia no es suficiente para establecer el perfil de un/a niño/a de altas capacidades, es necesario realizar también la identificación en base a otros tests y pruebas específicas que permitan hacer una valoración completa de las capacidades intelectuales y el talento o talentos.
Referente a la metodología de medida del CI, existen dos instrumentos, el WISC-IV y el Stanford-Binet aceptados y utilizados a nivel mundial, excepto por parte de algunas universidades de los EUA que utilizan instrumentos propios.
En cuanto a los instrumentos para medir las habilidades o talentos, la creatividad y el desarrollo emocional en la infancia existe más diversidad. Los expertos en psicomotricidad concluyeron, en el 2005, que la metodología aplicada para la identificación de ACs del Center for Talented Youth (CTY) de la Johns Hopkins University era la mejor del mundo.
La Fundación Privada Javier Berché (FPJB) utiliza unos instrumentos de medida de las habilidades académicas verbal y matemática, propiedad del CTY que también utilizan Irlanda, Grecia, China y Tailandia.
Considera que carreras como magisterio o pedagogía deberían incluir formación específica sobre detección y atención al alumnado con altas capacidades o superdotación, por lo menos unos contenidos que permitan que los/as maestros/as, los/as pedagogos/as y los/as profesores/as de secundaria tengan unas nociones básicas sobre las características de los niños, las niñas y jóvenes de altas capacidades o superdotación. Dicha formación les debería capacitar para hacer detecciones precoces, derivar la identificación a los/as psicólogos/as especialistas o a centros especializados y atender de forma significativa al alumnado dotado, en el marco de una escuela inclusiva e integradora a nivel educativo y social, así como orientar y poder trabajar conjuntamente con los padres y/o las madres de dichos alumnos.
Ya que la escuela o el sistema educativo no están preparados aún para atender de forma adecuada al alumnado con altas capacidades o superdotado. De todas formas dice que se han hecho progresos importantes a nivel de legislación, de prescripciones a los centros educativos desde las administraciones educativas de distintas comunidades autónomas, de los propios especialistas en pedagogía y psicología, así como por iniciativa propia de maestros, profesores, directivos e inspectores de centros educativos. Aún queda camino a recorrer para que la escuela y el sistema educativo puedan dar una respuesta adecuada.
Se debería hacer un esfuerzo importante en mejorar la formación inicial y permanente dirigida a los docentes, los especialistas en: educación, pedagogía y psicología sobre el tema que nos ocupa. También dinamizar espacios de debate entre expertos, docentes, padres y otros agentes sociales sobre la importancia de la identificación y la educación significativa de niños, niñas y jóvenes con altas capacidades. Así mismo, fomentar la investigación al respecto. Todo, con el objetivo de que los niños, las niñas y jóvenes dotados puedan ser personas felices, integradas en la sociedad y su capital humano e intelectual pueda revertir en el desarrollo de nuestro país, evitando su fuga a otros países.
La familia tiene un papel fundamental para exigir que la escuela integre y proporcione un aprendizaje significativo a su hijo/a superdotado. No es fácil dicho papel porque muchos no saben cómo afrontar la educación de su hijo/a y están solos en su labor.
Las asociaciones, entidades y fundaciones dedicadas al alumnado dotado han crecido mucho en España, en los últimos años porque hay una necesidad sin resolver de forma satisfactoria a nivel de la escuela y de la sociedad. Cada vez son más las voces que plantean el problema entorno a las dificultades que tienen las familias, la escuela y los expertos para identificar y atender de forma adecuada a este tipo de alumnos.
Un buen camino para avanzar, es el trabajo conjunto entre asociaciones de padres y madres de alumnos/as dotados/as, escuelas con buenas prácticas en la atención de este tipo de alumnos/as, asociaciones de profesionales expertos y otros agentes sociales interesados en el tema.
Leer la entrevista en la que se inspira este artículo en EducaWeb